Con la velocidad de una llamada la compañía Tigo recibió autorización de la Secretaría de Planeación Distrital para el montaje de una antena de telecomunicaciones en el separador central de la Avenida Circunvalar y más exactamente en la zona próxima al monumento de la Ventana del Mundo.

La decisión es objeto de serios cuestionamientos teniendo en cuenta que la licencia de intervención y ocupación del espacio público fue otorgada sin tener en cuenta las afectaciones del entorno de este ícono de los barranquilleros.

En este sentido, hay quienes consideran que la Secretaría de Planeación fue muy acuciosa en el otorgamiento de la licencia, pero sin tener en cuenta, además, a los propietarios del sector, también como eventuales afectados.

La antena tendría una altura de 18 metros y frente a la Ventana del Mundo se convertiría en un verdadero adefesio visual, especialmente para los miles de visitantes que acuden al monumento para la foto del recuerdo.

Al respecto, el Secretario de Planeación, Pedro Pablo Oliveros, aseguró que la licencia fue otorgada en cumplimiento del Decreto nacional 1077 de 2015 y de los decretos locales 568 y 219, este último expedido el 6 de junio de este año.

“La licencia fue autorizada en el mes de agosto en atención al estudio del sitio y altura, y el separador central está permitido”, agregó el funcionario.

Sin embargo, manifestó que como todo acto administrativo es susceptible de modificación o revocatoria, con razones que lo justifiquen, teniendo en cuenta el interés general.

“Quien considere razones para hacerlo puede solicitar la modificación o revocatoria, aunque en este caso podría proceder la reubicación”, recalcó.

Lo cuestionable del caso es que el montaje de la antena nunca fue socializado en el sector, a efectos de conocer las opiniones de quienes resultaren eventualmente afectados. La respectiva Resolución tampoco aparece publicada en la Gaceta Oficial.

Es decir, el trámite se hizo con el ‘teléfono roto’ hacia la ciudadanía.